Esta semana se inaugura en París Bourse de Commerce, el museo creado por François Pinault, el fundador del conglomerado Kering, que agrupa a marcas tan prestigiosas como Balenciaga, Gucci, Saint Laurent o Alexander McQueen. Así nos relata cómo es su relación con el arte, y cómo se desarrolló la intervención de Tadao Ando en el histórico edificio.
¿Cómo le hace sentir el arte contemporáneo?
Depende del arte. Por algunas obras siento muy poco, o incluso nada. Pero de vez en cuando me encuentro con alguna pieza que realmente destaca; una llamativa obra maestra que parece estar llamándome, y ésa suele ser una buena señal.
¿Qué ocurre en ese primer encuentro con una obra de arte?
Me siento incapaz de definir lo que ocurre. Siento una emoción intensa, algo me agarra, me grita cuando me enfrento a una obra maestra. Muchas veces me siento desconcertado por esa intensidad, y al mismo tiempo atrapado, porque me digo a mí mismo que no puedo dejar escapar la obra. Entonces comienzo con el proceso de incorporarla a una colección que permita a otros descubrirla, con la esperanza de que éstos sentirán la misma experiencia que sentí yo en mi primer encuentro con la pieza.
¿Cuál es la pieza de su colección que más alegrías le ha dado?
Espero que sea la pieza que descubriré mañana o los próximos años. Muchas de las piezas de mi colección me han dado enorme placer, pero aún así espero que la más bella de todas, aquélla que me dará mayor alegría, siga ahí fuera.
¿Qué desea para la gente que viene a ver sus obras?
Hay muchas obras contemporáneas, incluso algunas vanguardistas, que los visitantes no habituados a ir a museos pueden tener dificultades de entender. Aún así, espero que intenten entender, que vayan con la mente abierta para ver las cosas de forma diferente en relación a su vida y los asuntos del mundo. Realmente creo que el arte es la mejor medicina.
¿Qué es lo que convierte a Bourse de Commerce en un museo único?
En primer lugar su historia y su localización en París, su impresionante arquitectura de los siglos XVIII y XIX, con su extraordinaria cúpula. Esta es la razón por la que quería restaurar con el mayor respeto y detalle posible este antiguo edificio, teniendo en cuenta lo que se construyó hace uno o dos siglos, e incluso antes, si nos fijamos en la columna Medici. También quería que se tuviera mucho cuidado en la intervención de Tadao Ando. Quería demostrar que este notable edificio antiguo podía coexistir en armonía con un diseño radical del siglo XXI. El conjunto funciona perfectamente. Y lo mismo puede decirse sobre el arte.
¿Por qué escogió este antiguo edificio catalogado en particular?
Creo que permitir a los arquitectos contemporáneos apropiarse de edificios antiguos, creando con ellos algo radicalmente nuevo, es una forma de mostrar que la vida continúa, que todo evoluciona. No debemos rechazar la arquitectura y el arte del pasado, ya que los últimos siglos se hicieron trabajos muy buenos; pero al mismo tiempo, hoy en día se crean trabajos de gran calidad, ya sea en arquitectura, en pintura o escultura; y Tadao Ando lo ha demostrado de forma brillante.
¿Qué le pareció el primer diseño propuesto por Tadao Ando para Bourse de Commerce?
Me quedé asombrado por la rapidez de su propuesta. Estaba sorprendido por la celeridad de su capacidad creativa. Acepté inmediatamente el rumbo de su propuesta. Su trabajo da testimonio de su talento. Al principio me sorprendió el concepto del círculo dentro del círculo, pero tras reflexionar sobre ello, comprendí que era lo que había que hacer. Fue capaz de expresar su creatividad en el contexto de un edificio histórico. Esto es lo que a él le gusta hacer.
¿Qué es lo que más aprecia del trabajo de Tadao Ando?
Me convenció de que el hormigón es un material noble, y que se pueden hacer cosas increíbles con él. El trabajo de Tadao Ando trata sobre el minimalismo. Todo lo necesario está ahí, y lo superfluo desaparece, como en el minimalismo. Mirando las creaciones de Ando, se puede apreciar que tienen todo lo necesario. Y nada más.